Carlo Ancelotti encuentra en el centro del campo la línea más caliente a la hora de componer su once esta temporada. La longevidad de la Santísima Trinidad (Modric es el jugador más mayor de la plantilla y Kroos el tercero), el fichaje de Tchouameni y la progresión mostrada por Valverde y Camavinga convierten a la medular en la línea con la competencia más abierta (hasta seis jugadores, los citados más Casemiro, con claro perfil de aspirar a la titularidad) en este Real Madrid 2022-2023 donde el reto del Sextete redoblará la exigencia. 62 partidos esperan a los blancos si luchan hasta el final por las seis competiciones en las que tomarán parte…
Casemiro se verá ante una tesitura desconocida para él en los últimos tiempos. El brasileño, de 30 años, no solo venía siendo titular indiscutible, sino que carecía de un recambio específico del que ahora sí dispondrá Ancelotti con la llegada de Tchouameni. Y pese a esa carencia, Carletto prescindió de Casemiro más tiempo que sus predecesores en el banquillo. El paulista venía de ser el jugador de campo con más minutos en las filas blancas en tres de las anteriores cuatro temporadas. La temporada pasada se quedó cuarto en el ranking, por detrás de sus compañeros Militao y Vinicius y de Alaba. Acostumbrado a jugar completos todos los partidos que era titular (Zidane solo lo cambió en ocho de los 95 partidos que le alineó de inicio en su segunda etapa), Casemiro vio en cambio como la temporada pasada Ancelotti lo sacó del campo antes de tiempo en casi un tercio (14) de sus 46 partidos como titular. El fichaje de Tchouameni, de 22 años y cuyo fichaje costó 80 millones de euros, acentuará esa tendencia de dar más descansos al brasileño.
Quienes están más acostumbrados a las rotaciones y pueden ver cómo esta temporada se convierten en un fenómeno más acusado para ellos son Luka Modric y Toni Kroos. El croata, que cumplirá 37 años el 9 de septiembre, fue el jugador más veces sustituido por Ancelotti la pasada temporada. De los 40 partidos que comenzó como titular, el italiano lo cambió en 26, los mismos que Vinicius, pero el brasileño jugó de inicio siete partidos más que el balcánico y salía del campo más tarde. Los cambios de Modric fueron de media en el minuto 79 y los de Vini, en el 88′.
Kroos, de 32 años, acabó la temporada con unos números muy parejos a los de su inseparable compañero en la media (han jugado 268 partidos juntos). Ambos participaron en 45 partidos y fueron titulares en 40. El alemán fue sustituido en menos partidos (18), pero Ancelotti lo retiraba, de media, cinco minutos antes que a Modric. Así, Toni acabó la temporada con 3.398 minutos disputados y el croata, con 3.437, apenas 39 minutos más.
Sus dos recambios, Valverde (cumple 24 años este viernes 22) y Camavinga (19 años), disfrutaron de un buen puñado de minutos la temporada pasada. El uruguayo, de hecho, acabó la temporada como el noveno jugador más utilizado (2.860′) por Ancelotti. El Halcón se benefició en parte de la ausencia de un titular claro en el extremo derecho, que hizo que el entrenador apostara en ocasiones por el charrúa en esa posición o modificar su dibujo y alinear cuatro centrocampistas. Fede fue titular en la final de París, toda una declaración de intenciones por parte de Ancelotti.
Otro indicio que dejó no solo la final, sino el camino hacia la Decimocuarta, fue el concurso de Camavinga. El francés fue el primero de los cambios que hizo Ancelotti (más que nada simbólicos, pues los ejecutó a partir del minuto 85) en Saint-Denis. Pero es que también fue el primer suplente en saltar al campo en los partidos de vuelta de octavos (PSG) y cuartos (Chelsea) y el segundo en el partido decisivo de semifinales contra el City. Camavinga respondió a la confianza de Ancelotti con grandes actuaciones y participó en la construcción del primer gol de Rodrygo en la remontada frente a los de Pep Guardiola.
En las dos últimas de esas tres mágicas noches en el Bernabéu se dio una situación premonitoria. Las remontadas contra Chelsea y City se alumbraron sin Casemiro, Kroos ni Modric sobre el campo y sí estaban sobre el césped Valverde (que jugó los dos partidos completos) y Camavinga. Dos jugadores que se han ganado los galones y que junto a Tchouameni cuestionarán la titularidad de la Santísima Trinidad blanca.
La incógnita del papel de Ceballos
En los dos últimos años el Madrid ha ido preparando con los fichajes primero de Camavinga y ahora de Tchouameni una transición tranquila en el centro del campo, pero se le ha quedado una pieza descolgada: Dani Ceballos. El utrerano, que cumplirá 26 años el 7 de agosto, regresó la temporada pasada a la disciplina blanca la temporada pasada tras dos años de cesión en el Arsenal. Su lesión en los Juegos Olímpicos le impidió durante la primera mitad de la temporada estar disponible para Ancelotti, que le fue dando entrada a cuentagotas al tiempo que le dedicaba elogios en sala de prensa. Ceballos termina contrato con el Madrid en junio de 2023 y tiene la etiqueta de transferible, pero no tiene ofertas convincentes. Aspira a estar en el Mundial de Qatar y puede endurecer aún más la competencia en la media.