Paulo Bento verá pasar hoy parte de su vida. A un lado estará Portugal, su país, con Fernando Santos en el banquillo, su último entrenador como futbolista en el Sporting de Lisboa y su sucesor al frente de la selección portuguesa, donde dirigió a varios de los que hoy son sus rivales: Rui Patricio, Cristiano, Pepe, Horta, Carvalho… Al otro, Corea del Sur, la nación que le da trabajo desde 2018 y su último rival como internacional portugués en el Mundial de 2002, cuando los asiáticos vencieron por 1-0 y le apearon del torneo. Todo ello lo recordará desde la grada del Ciudad de la Educación, porque está sancionado tras su expulsión por protestar.
Portugal llega con billete para octavos, aunque está por concretar su posición (sigue el partido en directo en As.com). Si perdiera y Ghana venciera con solvencia a Uruguay, Cristiano y cía acabarían segundos. Ello implicaría un día menos para preparar el siguiente duelo y vérselas el lunes con Brasil. Ya solo por eso que no espere Bento compasión de sus paisanos, aunque Santos vaya a realizar algún cambio en su once para no cargar las piernas y evitar sustos con alguno de sus cuatro apercibidos: Días, Neves, Joao Felix y Bruno Fernandes, su estrella en Qatar.
Cristiano también podría descansar, aunque está a un gol de igualar a Eusebio como máximo goleador portugués en un Mundial y en la lengua de los fados Cristiano y récord son sinónimo. Así, si juega, lo podrán ver en Corea, donde no lo hizo en un amistoso que disputó allí la Juventus y la organización tuvo que devolver el 50% de la entrada a los aficionados que protestaron por ello. Mitomanía se llama tal queja.
Corea tiene que ganar y, a bote pronto, que no lo haga Ghana. Aun así necesitará de calculadora y goles para lograr por tercera vez en 11 participaciones pasar la fase de grupos. Bento tiene casi recuperado al defensa Kim Min Jae, preparado a su referente Son Heung Min y en el país asiático le reclaman la presencia de Kang in Lee como titular.