Crisis total en el PSG

El 11 de octubre de 2022 fue, sin duda, una montaña rusa para el PSG. A mediodía estallaba la bomba de que Kylian Mbappé no estaba contento en París y que quería dejar el club cuanto antes. Un incendio que intentó sofocar de forma inmediata el conjunto parisino. Luis Campos, consejero deportivo, reconocía en la previa del partido ante el Benfica que el delantero no le había mencionado nada sobre un traspaso en enero, aunque no pudo confirmar si está feliz en la capital francesa.

El descontento de Mbappé ha generado una pequeña crisis interna, sobre todo en los despachos. De acuerdo con la información de L’Équipe, la relación entre Nasser Al-Khelaïfi y Luis Campos no es buena. De hecho, ambos tuvieron un enfrentamiento en abril de 2019. Durante un Lille-PSG, el presidente de la entidad parisina bajó al túnel de vestuarios a recriminarle al árbitro del encuentro su actuación, mientras que Campos le respondió con firmeza: “Esto es Lille, aquí no presionamos a los árbitros”. A lo que el qatarí respondió: “¿Y tú quién eres?”.

El férreo carácter de Al Khelaïfi tampoco olvida que Luis Campos, que fue contactado por el Real Madrid en agosto de 2021, fue una de las personas que intentó colocar a Kylian Mbappé en el Real Madrid. La cercanía del luso a la familia del internacional francés y su figura paternalista durante su etapa en el Mónaco pudo jugar un papel decisivo en el frustrado traspaso del delantero al conjunto blanco.

Otra de las discrepancias que se generaron internamente, días después de la renovación de Mbappé, fue en la elección del entrenador. Mientras que Al Khelaïfi quería fichar a Thiago Motta para suceder a Pochettino, Campos fue directo y únicamente contempló a Galtier para el banquillo del PSG. Según L’Équipe, el exdirector deportivo del Lille no contempla la posibilidad de seguir trabajando con Antero Henrique, hombre de confianza de Al Khelaïfi y que fue uno de los que llevó la voz cantante en el insípido mercado de fichajes que realizó el PSG en verano.

Galtier estalla

La presión vivida estos días desde que saltara la noticia Mbappé hizo que el propio técnico del PSG, Christophe Galtier, estallara en la rueda de prensa previa al partido contra el Olympique de Marsella. Galtier respondió así en la primera pregunta: “Lo primero es que hay que tener maestría, experiencia y cierta edad para gestionar todo esto en el mejor de los casos. Lo que quiero decirte es que nunca habláis (los periodistas) de fútbol. Estoy aquí, soy el entrenador del PSG, estoy orgulloso y feliz por ello, y finalmente me doy cuenta de que partido tras partido, conferencia tras conferencia, tenemos que hablar un minuto de fútbol en una conferencia de diez minutos. Y cualquier cosa que os diga, no me creéis porque escribís lo contrario y decís lo contrario. Yo digo que va bien, que estamos unidos y escribís lo contrario. No estoy aquí para comentar rumores. Sobre Kylian, hubo rumores que salieron la tarde del partido, Kylian tuvo la mejor de las respuestas, jugó bien y fue elegido el mejor del partido. Tengo muchos defectos, pero soy muy honesto, no te miento. Para responderte a lo de Kylian, no he hablado de EL Rumor, he visto a Kylian muy serio en la preparación del partido”.

La prensa insistía en los rumores y en no hablar de fútbol y Galtier más se calentaba: “Tal vez podríamos centrar la rueda de prensa en el fútbol. Las cosas van bien en el vestuario. Puede que no nos besemos todos los días, pero va muy bien. Y mejor que en otros lugares”, dijo malhumorado.

Más de 300 millones de pérdidas

Por tercera temporada consecutiva, el PSG ha tenido pérdidas que superan los 100 millones de euros. De acuerdo con la información de Le Parisien, el conjunto parisino tuvo un déficit superior a 300 millones de euros durante el último ejercicio, el 2021-2022. De hecho, dichas cifras estarían cerca de los 350 millones, en lo que supone un incremento considerable respecto a la última temporada.

En la temporada 2019-2020, las pérdidas ascendieron a 124 millones, se incrementaron a 224 en la 2020-2021 y superaron el umbral de los 300 en el último ejercicio. Excedería, por tanto, con creces la previsión económica que inicialmente había enviado el club a la DNCG, el organismo financiero encargado de la regulación de las cuentas de los clubes franceses.

El actual líder de la Ligue 1 está pagando las consecuencias del coronavirus y de la mala gestión de Leonardo durante las últimas temporadas. Hay muchos jugadores con contrato, sobre todo cedidos, los sueldos son desorbitados y los ingresos en concepto de ventas no han tenido el resultado deseado. El PSG recibió 55 millones durante el último ejercicio, por lo que la compensación del déficit no es que haya sido difícil, es que ha sido imposible.

En septiembre, el conjunto de la capital francesa recibía un aviso de la UEFA por incumplimiento del Fair Play Financiero mediante una multa en la que debía abonar 10 millones de euros y otros 55 quedaban en suspensión si conseguía revertir la situación económica. Según Le Parisien, para intentar paliar el agujero económico, el club confía en tener un presupuesto de 800 millones que conseguiría reducir las pérdidas. En término de sanciones, en Francia el único requisito que pone la DNCG es que garantices liquidez para pagar las deudas, algo que sobradamente puede asegurar el PSG con la inversión de Qatar.