Divorciarse en Emiratos es más frecuente de lo que parece. De hecho, en los últimos años estas cifras están aumentando vertiginosamente. Eso sí, de lo que cuenta la rumorología hasta la realidad, hay un camino tan largo como puede ser llegar a obtener un buen divorcio. Lo que es cierto es que las leyes en esta parte del mundo son diferentes y por ello es muy recomendable contar con la ayuda de un abogado antes de tomar la decisión. Preguntamos al abogado Aarón Portero, que lleva casos de divorcio en Emiratos, para que nos explique las diferentes escenas de divorcio.
¿Cuál es el proceso para divorciarse en Dubái?
El proceso de divorcio, en Dubái y EAU, comienza cuando cualquier parte interesada solicita el divorcio ante el tribunal competente.
Una vez realizada la petición al juzgado se llevará a cabo un proceso de “conciliación” obligatorio donde las partes expresarán sus problemas ante el mediador/conciliador, con el fin de resolver esos resquicios y llevar a cabo una solución amistosa.
Cuando el acto de conciliación se ha llevado a cabo, las partes pueden haber llegado a un acuerdo amistoso. Si es así, éstas firmarán un convenio con todos los acuerdos establecidos y regulando la situación de los cónyuges una vez producido el divorcio. Acto seguido, se ratificará el convenio ante el juez competente.
¿Y qué ocurre si no hay acuerdo?
En el caso que las partes, previo trámite anterior, decidan no tramitar el divorcio vía mutuo acuerdo, el interesado deberá realizar una solicitud al tribunal, acompañado de letrado, para proceder con el divorcio contencioso.
¿Cuál es la ley aplicable para el divorcio?
La ley en Emiratos es muy generosa. De conformidad con la Ley Federal No. 28/2005 (sobre el estatuto personal), ” Las disposiciones de esta Ley se aplicarán a los ciudadanos del Estado de los Emiratos Árabes Unidos, a menos que los no musulmanes tengan disposiciones especiales aplicables a su comunidad o confesión. Se aplicarán igualmente a los no ciudadanos, a menos que uno de ellos solicite la aplicación de su ley.”
Esto significa que la ley permite que las partes del proceso apliquen su ley nacional especialmente en casos de divorcio en los que ambas partes son del mismo país.
Sin embargo, también se establece que la ley del estado del cual el esposo es nacional en el momento en que se contrae matrimonio se aplicará a los efectos sobre el divorcio.
Además, en el caso que la ley del país de origen de las partes no cubra un aspecto del procedimiento de divorcio, los tribunales tienen discreción para aplicar la ley de los EAU.
¿Pero qué ocurre en el supuesto que el hombre sea musulmán y la mujer es no musulmana?
En esto caso, lo más probable es que se aplique la Ley Sharía.
¿Qué consecuencias puede tener la aplicación de la ley Sharía a diferencia de otra ley?
De acuerdo con la ley mencionada con anterioridad, en el caso que los cónyuges tengan un hijo, la madre biológica del menor será quien tendrá la custodia y el padre será el tutor. El artículo 156 de la misma ley establece que la custodia de un niño la mantendrá la madre hasta que el hijo cumpla 11 años y cuando su hija cumpla los 13 años. Sin embargo, la madre también tiene el derecho de solicitar la extensión del período de custodia hasta que su hijo termine su educación y su hija se case.
Como tutor, el padre será el responsable de proveer al menor con los recursos financieros suficientes para su correcto desarrollo. Es decir, el padre tendrá que sufragar los gastos con relación a alimentos, gastos médicos, educación y cualquier otra necesidad.
Igual que en los tribunales de otros países, los tribunales de UAE y Dubái actúan a favor del interés del menor.