Alemania va muy en serio. Recibió de parte de la FIFA un bofetón tremendo al amenazar con castigar a Manuel Neuer, su capitán, con una cartulina amarilla antes de saltar a jugar al campo si no desistía en su empeño de portar el brazalete arcoíris, símbolo de la reivindicación de colectivos como el LGTB, durante el Mundial. Un ataque frontal contra el país de Qatar, el organizador, donde la homosexualidad está penalizada.
Una vez recibida la notificación oficial de FIFA, Alemania fue rotunda en su respuesta. Primero fue Neuer. A quien siguió Bernd Neuendorf, presidente de la Federación, y Oliver Bierhoff, manager del equipo alemán. Alemania no ha dudado en calificar la maniobra de FIFA como un “chantaje” deportivo. Durísimo fue Hansi Flick en su comparecencia oficial en el Palacio de Convenciones de Qatar. El técnico alemán no dudó en apartar a un lado el partido contra Japón para reivindicar la pelea que motiva a Alemania también en este momento. “Es una pena que ya no se puedan defender los derechos humanos”, lanzó sin miramientos el técnico alemán en una de las ruedas de prensa más duras que se recuerdan. Un mensaje claro que no va de cara a la galería.
En ese sentido, AS ha podido confirmar con la Federación germana que no hay la más mínima intención de abandonar el tema. Por varias razones. Primero, porque como dice Flick, se trata de la defensa de los derechos humanos, algo en lo que trata de involucrarse a fondo la Federación. Segundo, por defender a su futbolista y capitán, al que consideran maltratado por una causa que debería unir y no causar polémica. Y tercero, por las formas. Alemania se queja porque considera la maniobra “chantajista”. En ese sentido, la Federación confirma que su cuerpo legal está estudiando en este momento emprender acciones legales contra FIFA por la maniobra utilizada y por la que Neuer y otros capitanes del Mundial han tenido que desistir en su intención de portar el brazalete de la campaña ‘One Love’. Mientras, los jugadores han desafiado la normativa a su manera. Goretzka ya lo anunciaba ayer cuando advirtió que algún símbolo iba a haber y así ha sido. Los jugadores germanos han llegado al estadio Khalifa enfundados en un chándal. En las mangas se podía apreciar un ribete arcoíris.
Neuer ha saltado al campo sin despejar la incógnita sobre si porta el brazalete con el lema #Onelove, sin embargo el linier del encuentro ha ido a revisárselo y finalmente porta el brazalete oficial de la FIFA, con el siguiente mensaje: “No a la discriminación”. Además la selección teutona ha posado en la clásica foto de antes del encuentro, tapándose la boca todos sus futbolistas como respuesta a la censura del brazalete de #Onelove. Sin embargo, la sanción en el campo no ha impedido que en el paco de autoridades, la ministra del Interior germana, Nancy Faeser vista con el brazalete en su brazo izquierdo. La ministra está sentada al lado del presidente de la FIFA, Gianni Infantino.
La selección alemana ha aclarado a través de su cuenta de Twitter, el motivo de la foto con la boca tapada: “Incluso sin brazalete, nuestra postura sigue en pie”. Además añaden que “no es un mensaje político, los derechos humanos no son negociables”. También añaden en un segundo mensaje que “lamentan tener que comunicar esto a día de hoy, cuando debería ser evidente”. El comunicado termina con un potente: “Negarnos el brazalete es lo mismo que negarnos la voz”.